CHANEL Crucero 2025-26 “Una pausa cinematográfica en el lago de Como”. Historia de RUNWAY REVISTA. Foto / Vídeo Cortesía: CHANEL.
La colección Crucero 2025/26 de CHANEL se presentó en la Villa d'Este, el icónico hotel a orillas del lago de Como. Con este pintoresco escenario, la Maison ofreció un desfile lleno de ambiente, referencias cinematográficas y una asistencia estelar. Sofia Coppola, Keira Knightley, Lupita Nyong'o, Margaret Qualley y muchas otras se dieron cita para ver la última expresión del lenguaje crucero de CHANEL, esta vez, creada íntegramente por el Studio de Création.



La colección, creada internamente por el taller, se presenta como un elegante homenaje: una reinterpretación visual de los códigos desarrollados por Karl Lagerfeld y Virginie Viard. No traspasa los límites, ni pretende hacerlo. En cambio, es un estudio cuidadosamente elaborado del legado de CHANEL: encantador, llevable e innegablemente hermoso, aunque a veces evoca el espíritu de un trabajo de estudiante de alto nivel, más centrado en la técnica que en la visión.
Presentada entre dos looks blancos —un manto playero y un vestido fluido de satén—, la colección se inspiró en el ritmo relajado de la vida hotelera. Básicos de crucero, como prendas de punto a rayas y sastrería suave, se presentaron junto a capas de lamé brillante, minifaldas de macramé y pijamas fluidos en tonos terracota, lila y buganvilla polvorienta. Estos fueron sutiles guiños a las terrazas cubiertas de glicinas y la majestuosidad sobria de Villa d'Este, en lugar de audaces desviaciones.
La ropa de noche incluyó tweeds con lentejuelas y vestidos sin espalda en tafetán crujiente, con guantes largos y cordones de perlas que evocaban el glamour cinematográfico que inspiró la ambientación. Aun así, la energía de la colección se mantuvo contenida: lujosa y refinada, pero sin el toque dramático que cabría esperar de una marca que se prepara para una nueva etapa creativa.
De hecho, este podría considerarse un momento de transición. Con la primera colección prêt-à-porter de Matthieu Blazy para CHANEL programada para octubre en París, la colección Crucero 2025/26 ofrece una especie de interludio. Refleja la fluidez del taller en los códigos de la casa, pero también su postura actual: mantener el legado en lugar de redefinirlo.
En el Lago de Como, CHANEL no reinventó la fórmula Crucero. La refinó. El resultado: una colección sofisticada, repleta de referencias, arraigada en el savoir-faire y claramente diseñada para conectar con una clientela que prioriza la continuidad sobre la provocación.


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